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Liberaron a la acusada por el doble parricidio de Pilar

La joven de 22 años acusada junto a su hermanastro y novio de asesinar, descuartizar e incinerar a sus padres en Pilar fue liberada por falta de mérito.

Para el juez, “no se advierten en el marco de la presente instrucción elementos idóneos a efectos de tener por cierta la participación criminal de Karen Klein en el homicidio de su progenitor, y la pareja de aquel”.

Afirma que cree en el relato que hizo Klein en su indagatoria porque cada vez que algo de lo que dijo pudo cotejarse, se demostró que dice la verdad.

Al declarar como imputada,  dijo que fue su pareja Acosta quien asesinó a balazos a su padre Ricardo Ignacio Klein  mientras dormía en su cama, y a su madrastra Myriam Esther Kowalczuk.

Agregó que Acosta la amenazó de muerte diciéndole que “si se había llevado dos vidas se podía llevar tres más”, en referencia a la suya y la de sus hermanos menores mellizos de 11 años, y que fue él quien se encargó de limpiar todo y le dijo que “los iba a cortar en pedazos con un hacha” y los iba a prender fuego.

En la resolución el juez enumera las cosas mencionadas por Klein que se pudieron chequear como verdaderas: “la compra de las herramientas en principio utilizadas para desmembrar a los cuerpos”, “la ocurrencia de incendios que por su magnitud y olor difieren de aquellos otrora realizados”, “la tenencia por parte de Acosta de armas de fuego”, “la patología psiquiátrica padecida por el imputado”, “el viaje en remise el día de los hechos a buscar a los menores al colegio” y “el efectivo hallazgo de restos calcinados de cuerpos”.

Para el juez, “la amenaza que eventualmente profiriera Acosta, ciertamente gozaba de idoneidad: advertirle respecto de la posibilidad de matarla utilizando el mismo proceder mediante el cual le habría quitado la vida a dos personas, incluyendo su madre, se advierte como un suceso pasible de ser acometido”.

Por último, señala que el hecho de que la acusada tuviera, según lo recalcado por el fiscal Marcelo Vaiani, una “actitud de desinterés” respecto al paradero de su padre y de su madrastra no puede ser tomado como un elemento de cargo, ya que “su actitud de aprobación o desaprobación respecto del homicidio, deviene en irrelevante a los fines penales”.

Respecto de Acosta, a quien el juez le dictó la prisión preventiva por “homicidio y homicidio agravado por el vínculo”, Saettone resalta que los dichos de su pareja Klein, a quien delató como autor del doble parricidio, son ”concordante con los indicios que conforman la instrucción”.

“El dictado del presente auto de prisión preventiva, es la única forma de asegurar la averiguación de la verdad, el desarrollo del procedimiento y la aplicación de la ley”, afirma el juez, para quien en el caso de Acosta existe tanto riesgo de fuga por la pena en expectativa -prisión perpetua-, como riesgo procesal de “entorpeciemiento” de la investigación.