Home / Area / DOCTRINA EN DOS PÁGINAS Diario Penal Nro. 221 -01.02.2019


DOCTRINA EN DOS PÁGINAS

Reseña del libro: "Delitos sexuales – Coerción sexual e internet” de Javier T. Álvarez. Ediciones DyD – Bs. As. 2018 – 249 ps. (rústica)

Por Daniel Schurjin Almenar

[1]

Dentro de la pluralidad de facetas cuya comisión reconocen los delitos sexuales, un sector verdaderamente singular y protagónico es el que entrecruza dicho ámbito con el terreno del cibercrimen.

Esto es así no solamente por la diversidad de modalidades delictivas que pueden reconocerse dentro del segmento individualizado; sino también por la relevancia de tales delitos en términos cuantitativos. Asimismo, por la calidad de las víctimas que se ven afectadas por la comisión de delitos sexuales a través de internet, que suelen reconocer elevados niveles de vulnerabilidad, en especial cuando se trata de mujeres, niños, niñas y adolescentes[2].

Lo dicho sirve para hacer notoria la relevancia de la temática evocada, cuyo entendimiento resulta poco asequible debido a factores tales como la atomización normativa que incide en la materia (vernácula e internacional / penal y extrapenal / sustantiva y adjetiva); la escasa cantidad de datos estadísticos actualizados que se posee sobre el punto[3]; la constante evolución y sofisticación de los canales que hacen posible la perpetración de maniobras delictivas de índole sexual en la web.

Precisamente, para contribuir a cortar el nudo gordiano que representa la conflictividad apuntada resulta trascendente —y celebramos— la aparición de una obra como “Delitos sexuales – Coerción sexual e internet”, de Javier T. Álvarez.

El autor es un debutante parcial en el abordaje de un tópico compuesto como el de referencia. Su reconocido recorrido en el estudio de los delitos sexuales[4] contrasta con su iniciación en la arena analítica del cibercrimen. Sin embargo, esa diferencia pasa inadvertida ante la excelente factura final del libro aquí comentado.

Se trata de un volumen compacto que condensa con solvencia una multiplicidad de temas de fondo, con adicional tratamiento de aspectos adjetivos y de otros relacionados con la cuestión forense y la investigación criminal.

Se divide en siete capítulos —el primero de ellos es una introducción— más un anexo de legislación local e internacional, que resulta de utilidad por la aspersión legal que afecta la temática, como ya hemos señalado.

El capítulo segundo se dedica en extenso a uno de los principales pilares del libro: el estudio de la denominada pornografía infantil, con sus antecedentes normativos, bien jurídico, aspecto objetivo y subjetivo del tipo penal y concursos; más el análisis de la exclusión de la pornografía infantil ficticia y un breve corolario.

Similar recorrido y análisis exegético es el que encontramos en el capítulo tercero —que con el anterior hacen al principal cimiento del texto en su conjunto—, esta vez en referencia al acoso sexual virtual a personas menores de edad (“grooming”). Antes de culminar este tramo, Álvarez repasa las objeciones constitucionales que presenta dicho delito y finaliza a través un corolario —más desarrollado que el del capítulo precedente— dedicado a la criminología mediática que afecta la cuestión auscultada.

Tras este par de capítulos más duros se da paso a otros tres, no menos interesantes sobre los siguientes puntos: comportamiento sexual on line y nuevas figuras delictivas: “sexting”, “revenge porn” “sextortion” y “stalking” (cap. IV); responsabilidad de proveedores del servicio de internet, intermediarios y motores de búsqueda (cap. V) y aspectos procesales: investigación, jurisdicción y competencia (cap. VI).

El capítulo séptimo es reservado por el autor para formular sus consideraciones finales. En su marco traza proposiciones en procura de superar los conflictos derivados de la materia abordada desde una perspectiva que, inexorablemente, contemple la visión de género y la diversidad.

Como característica adicional cabe destacar la actualizada cita de doctrina y jurisprudencia vernácula y extranjera que da sustento a distintos tramos del libro. Asimismo, la inclusión de cuadros y gráficos que denotan el esfuerzo del escritor por facilitar al lector la comprensión y asimilación de los temas que ofrece.

En suma, el análisis de “Delitos sexuales – Coerción sexual e internet” revela un paso más en la consolidación académica de Javier T. Álvarez como un experto en una de las más representativas manifestaciones del derecho penal nuclear; pero que se ha animado a más, al proponerle al lector un recorrido que sale de lo unidimensional, sobre la base del entrecruzamiento con las modernas aristas que emanan de una materia en expansión como es el ciberdelito.

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 [1] Especialista en Administración de Justicia (UBA). Docente UBA. Subsecretario letrado de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia, Ministerio Público Fiscal de la Nación.

[2] Estudios estadísticos de la Dirección Nacional de Política Criminal (Ministerio de Justicia) indican que en el caso de la justicia ordinaria, tanto en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como en la provincia de Buenos Aires, la mayor cantidad de denuncias recibidas en relación a delitos informáticos se vinculan con el art. 128 CP —ofrecimiento y distribución de material relacionado con menores de edad desnudos o representaciones de los mismos por medios informáticos— (Sain, Gustavo —Dir.—, “Segundo muestreo de denuncias judiciales de la República Argentina: Año 2014”, 1ª ed., Ediciones SAIJ, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 2017 (disponible, en línea, en http://www.pensamientopenal.com.ar/system/files/2017/07/doctrina45539.pdf).

[3] A título ilustrativo, sobre lo dicho, puede verse el trabajo de María Milagros Ribón, titulado “La necesidad de contar con estadísticas oficiales sobre los delitos sexuales que se comenten en Internet contra los menores de edad y su importancia en la política criminal argentina”, disponible —en línea— en http://www.pensamientopenal.com.ar/doctrina/46136-necesidad-contar-estadisticas-oficiales-sobre-delitos-sexuales-se-comenten-internet.

[4] Álvarez es presentado en la obra como “…Especialista en Delitos Sexuales,…profesor de la materia “Delitos Contra la Integridad Sexual” de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Autor del libro “El delito de corrupción de menores” (Ed. Ad Hoc, 2014)”, más allá de la mención que allí se hace de sus titulaciones como especialista y magíster en Derecho Penal por la Universidad Torcuato Di Tella; y de otras credenciales en el plano de la docencia.

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