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Estados Unidos: En Arkansas se decide sobre la ejecución o no de once personas privadas de la libertad mediante inyección letal

La jueza federal Kristine Baker, debe decidir si permite que Arkansas lleve a cabo su plan de ejecutar, a partir del próximo lunes, a siete personas privadas de su libertad en un plazo de 11 días. El apuro de Arkansas, que no aplica la pena desde el 2005, se debe a que en mayo caducará su reserva de midazolam, el cual es uno de los tres componentes utilizados para matar a una persona mediante una inyección letal.

Según el Centro de Información de la Pena de Muerte, sería una decisión sin precedentes en Estados Unidos, desde que en 1976 el Tribunal Supremo reinstauró la pena capital, ya que el Estado sureño “batirá el récord” de Texas, que ejecutó a seis reos en un plazo de 11 días en 1997 y 2000,

Baker escuchó este martes nuevos testimonios antes de emitir una sentencia, que podría llegar el jueves, en el juzgado del Distrito Este, en Little Rock.

Respecto a la pena de muerte en sí, a petición de los presos, el experto en anestesia Joel Zivot advirtió, en un testimonio el lunes, que la combinación de fármacos que se utilizarían en las ejecuciones podría desatar complicaciones –como sentirse ahogado “bajo el agua” y “quemar las venas”–.

Sin embargo, Lee Rudofsky, abogado del Gobierno de Arkansas, argumentó que el potencial de una muerte dolorosa no es motivo suficiente para impedir la pena capital, en alusión al aval que ha dado la Justicia al uso de midazolam.

Los planes de Arkansas llegan en un momento en que las condenas a muerte en Estados Unidos están en su nivel más bajo en cuatro décadas –30 personas en 2016, un 39% menos que el año anterior– como consecuencia de problemas logísticos y legales.

El Tribunal Supremo ha avalado el uso del midazolam, que se ha extendido después de que los Estados se quedaran sin pentotal sódico. Este último es el anestésico que se utilizaba para dormir a la persona antes de inyectarle las otras dos sustancias que acaban con su vida: el bromuro de pancuronio –que paraliza todos los músculos y corta la respiración– y el cloruro de potasio –que detiene el corazón–, provocando por tanto la muerte. Esa es la combinación que prevé usarse en Arkansas.


Fuente: Diario El País, en www.elpais.com